Ante todo, decir que este tipo de dietas basadas en la cetosis tiene tanto seguidores acérrimos como detractores totales. Los detractores dicen que incluso se puede producir un coma por este tipo de alimentación. Pero en realidad, ¿alguien conoce algún caso?. No voy a criticar a nadie, por supuesto, pero la mayoría de las bellezas y tipazos que aparecen en los medios se mantienen gracias a este tipo de dieta (lógicamente en su fase de mantenimiento)
Yo estoy a favor de esta dieta, así que, a por ella.
UN CONSEJO:
Lo mejor es comprarse el libro, Aunque, como yo me lo he comprado, los que sigáis la dieta conmigo no lo vais a necesitar, puesto que lo sigo al pie de la letra. Si tienes alguna duda, me lo preguntas.
EL PLAN PROTAL (EL RÉGIMEN DEL DR. DUKAN)
¿Qué es el plan Protal?
El plan de ataque nos propone el Dr Dukan se llama así por su comodidad. Protal es la contracción de dos palabras: proteínas y alternativas.
En efecto, consiste en un dúo de dietas que funciona como un motor de dos tiempos: un periodo de régimen de proteínas puras (régimen de ataque) seguido de un periodo de proteínas combinadas con verduras, porque el cuerpo necesita un tiempo de recuperación para poder digerir su pérdida de peso. El plan Protal es pues la base de este régimen.
La dieta en su conjunto ofrece ventajas seguras, y conservarás la motivación por 4 razones:
- El plan Protal propone una lista de consignas muy precisas, basta respetarlas para alcanzar el éxito.
- El plan Protal es un régimen totalmente natural.
- La dieta Protal no es frustrante, ya que no impone ninguna restricción de cantidad.
- No es posible efectuar el plan Protal a medias: ¡o se completa y se acepta en su totalidad, o se fracasa!.
Fase 1: Las proteínas puras (PP)
Es la fase de ataque del régimen, que estará únicamente compuesta de proteínas puras. El arranque es fulminante, y la pérdida de peso muy rápida.
Este periodo es el más motivador, porque se ve como la aguja de la báscula desciende a una velocidad vertiginosa, un poco como si se ayunara. Este plan de ataque es verdaderamente eficaz.
En esta fase se consumirán las proteínas más puras posibles y se eliminarán al máximo todos los demás nutrientes.
En realidad, no es posible eliminar por completo de la alimentación los glúcidos y los lípidos: en efecto, a parte de la clara de huevo, no existe ningún elemento que consista en sólo proteínas. El régimen agrupará pues cierta cantidad de alimentos cuya composición es la más cercana posible a la pureza en proteínas, como por ejemplo ciertas categorías de carnes, de marisco, de aves de corral, de huevos, de lácteos con 0% de materia grasa. Duración: este período puede durar entre 1 y 10 días, según el peso que haya que perder.
Fase 2: El crucero con las proteínas alternativas o proteínas/verduras (PV)
Esta segunda fase es indisociable de la primera, pues ambas funcionan en combinación. Se alternarán periodos de proteínas + verduras con días de proteínas puras.
Tanto el primer régimen como el segundo ofrecen idéntica libertad en cuanto a cantidades. Ambos permiten consumir los elementos autorizados “a voluntad”, en cualquier momento…
Estas dos dietas hay que alternarlas, dependiendo del peso que haya que perder y de la edad, pero también de la motivación.
Duración: Esta fase de crucero ha de mantenerse sin pausa hasta la obtención del peso deseado.
Fase 3: La consolidación del peso obtenido.
La misión esencial de esta fase es volver a abrir la alimentación y estabilizarse. Podrás comer de modo más variado. Pero habrá que evitar el efecto rebote y el riesgo de recuperar peso. ·El organismo intentará resistirse, sobre todo si la pérdida de peso conseguida es considerable. El cuerpo reaccionará frente al saqueo de sus reservas y tratará de almacenarlas de nuevo: a tal efecto, reducirá al mínimo su gasto energético y asimilará al máximo cualquier alimento consumido. Una comida abundante que habría tenido un efecto escaso antes del inicio del régimen, estará repleta de consecuencias durante todo este periodo.
Por eso se limitarán las cantidades de alimentos más ricos, para volver sin riesgos a la estabilidad del metabolismo y acabar con el efecto rebote, que es una de las causas más frecuentes del fracaso de los regímenes de adelgazamiento.
Duración: está ligada a la cantidad de peso perdido y es muy fácil de calcular: 10 días de consolidación por kilo de peso perdido.
Fase 4: La estabilización para siempre.
Hemos visto que las personas familiarizadas con el sobrepeso saben muy bien que incluso después de un régimen no les será posible adquirir el equilibrio y la moderación alimentarios que la mayoría de los nutricionistas aconseja, acertadamente, como garantía de conservación del peso. Por eso es importante seguir tratando a la persona que ha culminado la fase de consolidación, teniendo en cuenta su personalidad de antiguo “gordo”.
Protal, en esta cuarta fase, impone un día a la semana de régimen de ataque inicial (normalmente el jueves)
Duración: tanto tiempo como sea posible; lo mejor, toda la vida… Las escasas medidas de la fase 4 le permitirán comer igual que los demás sin volver a ganar peso.
MI CASO:
Tras intentar hacer dietas hipocalóricas y que no me funcionaran, fuí a una endocrina para que me ayudara.
Su respuesta no me gustó. Poco menos que me llamó mentirosa, porque esa es la única dieta real que existe y no podía hacer nada por mí, que si no me funcionaba es porque no la seguía bien.
Así que empecé a mirar en serio otro tipo de dietas que ya conocía pero que no había seguido, y me encontré con la dieta del Dr. Dukan.
MI INVESTIGACIÓN SOBRE LA DIETA:
Muy importante: Hay que estar bastante sano para hacer esta dieta sin riesgos para la salud. No es que sea dañina en sí, es que, por ejemplo, si eres diabético o tienes alguna deficiencia del hígado o los riñones, ni se te ocurra seguirla.
Además, cada uno es libre de hacer con su cuerpo lo que quiera, por supuesto, pero es bueno hacerse una buena analítica. Yo no soy médico, sólo transmito lo que yo voy a hacer conmigo misma.
Voy a explicar con mis propias palabras lo que he descubierto hasta ahora:
La dieta consiste en que tu cuerpo entre en un estado de “cetosis”. Esto consiste en que tu metabolismo cambie. Me explico:
Hay que alimentarse principalmente de proteínas de metabolismo rápido, las cuales se encuentran en carnes, aves pescados y huevos. Las proteínas de las verduras son de metabolismo lento, por eso prescindimos de ellas al principio, para empezar antes a adelgazar.
Debemos reducir al máximo los hidratos de carbono que consumimos para que, de este modo, el cuerpo necesite producir energía extrayéndola de la grasa.
También hemos de disminuir todo lo posible el consumo de grasas, puesto que lo que pretendemos es que se metabolice nuestra grasa corporal, y, si ingerimos grasas, se alimentará de éstas y no de las nuestras.
Para que se produzca la cetosis rápidamente, debemos consumir por debajo de 45 grs de hidratos al día. De 45 a 65 grs. al día se mantiene la cetosis, lo cual sirve para una dieta de mantenimiento. Y por encima de esta cantidad, salimos de la cetosis.
La cetosis no es instantánea. Cuando empiezas la dieta, tarda unos tres días en producirse, pero luego ya actúa de manera continuada.
Una advertencia: la cetosis, y por eso sabemos que se está produciendo, genera mal aliento y que la orina huela muy fuerte. No pasa nada, sólo hay que tener a mano chicles sin azúcar.
Importante también es ingerir de dos a tres litros de líquido al día, en forma de agua o infusiones. ¿El motivo? Siempre se debe beber mucho, pero, cuando en nuestro cuerpo se está produciendo la cetosis, nuestro hígado y nuestros riñones trabajan mucho más, y el agua hace que el trabajo les resulte menos pesado.
También es importante, aunque no imprescindible, empezar a tomar un complejo vitamínico, ya que, al no tomar azúcares ni verduras, tendremos una carencia de vitaminas y minerales, y pueden producirse mareos y dolores de cabeza, sobre todo la primera semana.
Otra cosa de la que me he podido dar cuenta es que, en realidad, al consumir más proteína, menos grasa y menos hidratos, las calorías que ingerimos son también bajas (estoy haciendo una tabla diaria, miradla).
Hambre no se pasa con esta dieta, ya que los alimentos ricos en proteínas sacian mucho el apetito, y además, te acostumbras a comer menos cantidad. Lo que sí es, es aburrida, y tienes que estar muy concienciado de lo que vas a comer y no lanzarte a por las “golosinas” que nos gustan. ¿A favor? Pues que es muy eficaz en poco tiempo. Eso sí, luego hay que evitar el efecto rebote, por lo cual no podemos hacer dos meses de dieta y luego hartarnos de pasta, arroz y dulces. Todo lleva su tiempo.
En general, el pescado tiene más proteína y menos grasa que la carne, por lo que los primeros días, si comemos más pescado y marisco, mejor.
Por cierto, preparaos para pasar mucho tiempo en el baño haciendo pipí, ya que por este medio es como se elimina la mayor parte de la grasa. El problema es que, sobre todo en la fase de ataque, es fácil estreñirse. Paciencia. (La proteína produce poco residuo)
Imprescindible hacer ejercicio diariamente, pero no ejercicio fuerte, lo mejor es caminar. Cuanto más ejercicio más cetosis se produce.
Con la cetosis sólo se pierde grasa, no masa muscular.